Encontré ayer un interesante artículo sobre la corrupción publicado en el boletín semanal Hoja del Sur de la ciudad de La Paz y por su importancia y actualidad lo transcribo en su totalidad a continuación:Cuanta más leyes y regulaciones se aprueben en este país, el calvario para los bolivianos se agravará día a día. No porque la mayor parte sea proclive a incumplir con la Ley, si no todo lo contrario. Porque para ponerse a derecho, el ciudadano debe pagar un precio. Un ejemplo sencillo: para obtener una cédula de identidad, es necesario el certificado de nacimiento. Al recabar ese documento, el empleado de la Corte Electoral, deliberadamente aumenta u omite un nombre o lo escribe con fallas ortográficas, para provocar el retorno del incauto impetrante y exigirle una propina para enmendar ese error. Si el ingenuo interesado no repara en la equivocación y presenta sus papeles con esa falta, se requerirá un juicio para cambiar el nombre. Esto sucede en Derechos Reales con los títulos de propiedad y en la Alcaldía Municipal con los planos de casas o departamentos sujetos a la aprobación edil.
Toda regla tiene su trampa en Aduanas, en ECOBOL, en ENTEL, en COTEL o en los consulados bolivianos en el exterior para sacar o renovar un pasaporte !!! Si a un ciudadano letrado pueden atracarlo de esa forma, imagínense los abusos que se cometen contra la menguada economía de los “hermanos campesinos” u otros bolivianos de escasa educación escolar! Tiempos de cambio? Pues comencemos por eliminar la traba de un juicio por corregir una letra en los nombres de los titulares en los documentos oficiales.
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