Mientras nacía el año 1962, una desconocida banda musical, dos
guitarras, un bajo, una batería, grabó en Londres su primer disco.
Los muchachos regresaron a Liverpool y se sentaron a esperar.
Contaban las horas, contaban los días.
Los muchachos regresaron a Liverpool y se sentaron a esperar.
Contaban las horas, contaban los días.
Cuando ya no les quedaban uñas por comer, un día 11 de Febrero
recibieron la respuesta. La Decca Recording Company les decía,
francamente:
No nos gusta su sonido.
No nos gusta su sonido.
Y sentenciaba:
Las bandas de guitarras están desapareciendo.Los Beatles no se suicidaron.
Las bandas de guitarras están desapareciendo.Los Beatles no se suicidaron.
Tomado del libro “Los Hijos de los días” de
Eduardo Galeano.
Publicado por JEAC.
No hay comentarios:
Publicar un comentario