domingo, 31 de marzo de 2013

50 Años del Sudamericano 63(7)

 ¡¡¡CAMPEONES!!!

Y llegó el partido final ante Brasil, que se disputó en Cochabamba el 31 de Marzo de 1963. Fue una tarde de fiesta para todo el país y también fue una tarde de muchos nervios ya que si perdíamos con Brasil, Paraguay se hubiera coronado campeón ya que en La Paz empataba con la Argentina a un tanto por lado. 

Brasil se puso en ventaja a los 22 minutos con gol de Flavio y empató Ugarte a los 20 minutos, a los 38 del primer tiempo Flavio volvía a marcar poniendo el 2 a 1 para Brasil, pero Camacho empató a los 45 terminando el primer tiempo con el marcador de 2 a 2. Eran muchas emociones para el sufrido aficionado boliviano que a ratos veía esfumarse la posibilidad de ser campeones por primera vez en nuestra historia. Mi vivencia de aquél partido, en el conventillo, era parecida al del partido contra la Argentina: todos los vecinos reunidos en torno a la mesa y los más chicos acurrucados escuchando atentamente el relato de Cucho Vargas y los comentarios de Lorenzo Carri. 

El segundo tiempo comenzó y parecía que Bolivia había entrado con todo: anotaron García a los 4 minutos, Alcócer a los 12 y Ugarte de penal a los 24. ¡¡¡Estábamos goleando al Brasil por 5 a 2, nadie lo podía creer!!!  Cuando se convirtió el quinto ya muchos comenzaron con el festejo anticipado, pero los brasileros iban a vender cara su derrota; Marco Antonio descontó a los 37 y Almir a los 44 puso el 5 a 4 definitivo. El comentarista decía que si se jugaban 5 minutos más Brasil nos empataba, es que nuestra selección había entrado al segundo tiempo con todo y derrocharon todo su esfuerzo hasta conseguir el 5 a 2. De ahí en más el equipo se refugió y permitió la reacción brasileña. Por eso los últimos minutos fueron de gran sufrimiento para los hinchas que seguíamos la transmisión radial. Cada ataque brasilero era una pesadilla para nosotros y recuerdo que a momentos me tapaba los oídos y cerraba los ojos, luego los abría nuevamente y el partido continuaba. Parecía un suplicio sin fin, hasta que llegó el pitazo final del árbitro; el grito de ¡¡¡Campeones!!!! retumbó en los patios del conventillo. Todos dimos un salto y nos abrazamos con el que más cerca se encontraba, gritábamos como poseídos y el llanto de alegría comenzó a aparecer en todos los rostros. Allí se inició la fiesta, algún vecino salió corriendo y regresó con una caja de cervezas, algunos otros lo imitaron. Volvieron a sacar el tocadiscos y empezó la fiesta. La gente bailaba en las calles y se escuchaban gritos de ¡Bolivia!, ¡Bolivia! por doquier.  El sueño se había cumplido, el equipo Boliviano era el campeón de aquél Sudamericano inolvidable para quienes de alguna manera lo vivimos.

(En las fotos dos de los goles de nuestra selección contra Brasil en aquella épica tarde de Cochabamba)

JEAC.

jueves, 28 de marzo de 2013

50 Años del Sudamericano 63(6)

















Y llegó el día del partido contra Argentina, el 28 de Marzo de 1963, era la verdadera final de aquél campeonato. Un día antes, en Cochabamba, Brasil había resignado posibilidades empatando a dos tantos por lado contra Ecuador, mientras que Paraguay se mantenía a la expectativa luego de su victoria por 4 a 1 contra Perú.

En La Paz todo era expectativa en ese día que a pesar de ser laboral parecía un Domingo o un feriado. Las calles estaban desiertas a la hora del partido,  todos en sus domicilios pegados al radio y a la transmisión de “La verdad desde la cancha” que se día había iniciado su transmisión antes de lo habitual. En el conventillo todo era nerviosismo, grandes y chicos, hombres y mujeres, todos reunidos en torno a un radio que había sido habilitado en medio del patio. En torno a una gran mesa estaban todos los vecinos mayores sentados y tomando unos “cocteles” que habían preparado para tan magno evento. Los chicos permanecíamos sentados en el suelo muy cerca de la radio para no perdernos ningún detalle del partido. Había mucha confianza en torno al resultado, pero Argentina había demostrado que no era un equipo fácil y había ido creciendo a medida que transcurría el campeonato, convirtiéndose  a estas alturas en uno de los principales animadores del campeonato.

Comienza el partido y a los 11 minutos Castillo marca el primero para Bolivia desatando nuestra euforia, pero cinco minutos más tarde, Rodríguez empata para Argentina y vuelve el nerviosismo. Luego Blacutt pone el 2 a 1 a favor de Bolivia y recuperamos la sonrisa y la confianza. El segundo tiempo se nos torna eterno y faltando diez minutos para el final, Rodríguez nuevamente empata para Argentina. Los últimos minutos Bolivia se va con todo contra el arco Argentino y en el minuto 42 el árbitro Peruano Yamasaki cobra un penal para Bolivia. Todos dimos un gran salto y puestos de pie esperamos el resultado de la jugada. Max Ramírez cobra el penal rematando fuerte casi al medio del arco y el arquero Argentino Andrada la desvía providencialmente con los pies, enviando la pelota al corner. En ese momento me pareció que el tiempo se detenía, había estupor no solo entre los que estábamos reunidos alrededor de aquella mesa, sino también en la transmisión radial que pareció callarse sin saber que decir en aquél decisivo momento. Solo alcanzamos a escuchar “se eleva Camacho cabecea y goooool, gooool de Bolivia”. Nadie lo podía creer en un solo minuto habíamos pasado de la ansiedad a la depresión y de la tristeza a una alegría infinita. Saltamos y brincamos de alegría, los mayores se abrazaban entre todos y algunos no entendían lo que pasaba. Su mente había quedado congelada en el penal fallado y les costaba volver a la realidad. Era un griterío impresionante.  Otros preguntaban que había pasado y alguien le dio todo el volumen al radio para escuchar las explicaciones del relator.

En las fotos que acompañan este posteo se refleja claramente lo que fue aquél minuto que nadie que lo haya vivido podrá olvidar en toda su vida: primero el penal atajado, luego el centro y cabezazo  y gol de Camacho y luego el festejo Boliviano y la desazón Argentina. De ahí al final todo fue nervios, puños apretados, gestos preocupados, manos en la cabeza todos esperando que el arbitro pitara la conclusión. Cuando esta llegó se desató la euforia, nuevamente abrazos y gritos de ¡campeones!, ¡campeones! a pesar de que aún faltaba una fecha que definía todo. Algún vecino sacó un tocadiscos y los mayores se pusieron a bailar, los más jóvenes hallaron una bandera boliviana y se fueron corriendo hacia el Prado Paceño. Los más chicos nos juntamos en la otra esquina del patio a darle duro a la “tejeta” y todos queríamos ser el Camacho de aquella tarde gloriosa e inolvidable.

JEAC. 

domingo, 24 de marzo de 2013

50 Años del Sudamericano 63(5)

El Domingo 24 de Marzo de 1963, Bolivia se jugaba en Cochabamba su futuro dentro del campeonato Sudamericano al enfrentarse al hasta entonces invicto conjunto de Paraguay. Todas las chances de los dos equipos dependían del resultado final del partido y así el partido fue nerviosamente disputado hasta que Fortunato Castillo en el minuto 27 del primer tiempo abría el marcador y otorgaba la tranquilidad necesaria al equipo nacional . Ausberto García, el popular “oso García” fue uno de los mejores jugadores del partido y así lo demostró  convirtiendo el gol definitivo del 2 a 0 a los 43 minutos del segundo tiempo, consolidando así un triunfo decisivo para nuestras aspiraciones a pesar que por delante teníamos dos partidos de los más difíciles, frente a Argentina y Brasil.

Mientras esto sucedía en Cochabamba, en La Paz hubo nuevamente jornada doble y en el primer partido Perú empató 1 a 1 con Colombia perdiendo de esta manera muchas posibilidades de estar entre los primeros del campeonato. En el partido de fondo la gran sorpresa la dio Argentina, que goleo a Brasil por 3 a 0 dando así un gran paso para conseguir el campeonato ya que en la siguiente fecha debía enfrentar a Bolivia. Fue la mejor demostración de buen futbol de los Argentinos en el campeonato y ya se vislumbraba el gran choque que debía ocurrir el Jueves siguiente en La Paz.

Los ánimos del público boliviano habían cambiado fundamentalmente, ahora todos hablaban de que Bolivia debía ser el campeón y la confianza era total en el equipo.

JEAC.

jueves, 21 de marzo de 2013

50 Años del Sudamericano 63(4)

La cuarta fecha del campeonato, se jugó entre el 20 y 21 de Marzo. Esta vez a Cochabamba le tocó tener fecha doble el día Miércoles 20 y a primera hora se enfrentaron los representativos de Paraguay y Colombia. Fue victoria del equipo de Paraguay por tres tantos contra dos y los Guaraníes ya se perfilaban como uno de los serios candidatos al título.  A segunda hora, Argentina derrotaba a Ecuador por cuatro a dos y volvía a ponerse como candidato, dando además una demostración de buen futbol.

El día Jueves 21 en La Paz, nuestra selección se jugaba una de sus cartas más bravas al enfrentarse a la selección Peruana que venía de ganar sus anteriores compromisos. Esta vez era un juego a todo o nada. Si nuestra selección perdía se perdían también las esperanzas de alcanzar el título ya que Perú se escaparía en la punta del campeonato.  A pesar de ser un día laboral, el viejo estadium Hernando Siles se abarrotó de tope a tope, y la barra dejaba escuchar el “yell” preparado para el campeonato sudamericano y que perdura hasta ahora: Bo, bo, bo…gritaba la tribuna norte, li, li, li…respondía la tribuna de general, via, via,via era el grito de la tribuna sur y todo el estadium coreaba “viva Bolivia…con su Litoral” y a continuación un sonoro aplauso cerraba el estribillo.

El partido fue nerviosamente disputado, el primer tiempo terminó con una ajustada victoria boliviana  con goles de Camacho y Alcocer, poniendo el transitorio empate el peruano Gallardo. El segundo tiempo los nervios afloraron en los jugadores bolivianos y Perú aprovecho para empatar con gol de León a  los 17 minutos y cuando parecía que se venía la noche para el conjunto boliviano, Ausberto Garcia definió el partido a los 31 minutos tal como lo muestra la foto adjunta. De ahí en más el equipo boliviano se refugió en su defensa defendiendo como leones este triunfo que era decisivo para nuestras aspiraciones.

En el conventillo en que vivía, los vecinos nos habíamos juntado todos en el patio y pegados a la radio escuchamos todo el partido sin casi movernos; en los últimos minutos todo era tensión, las señoras amarraban sus pañuelos lo más fuerte que podían para “amarrar las piernas de los Peruanos” y  los hombres apretaban los puños esperando el final. Un suspiro de alivio y un grito de “viva Bolivia” se escucho cuando el arbitro decretó el final del partido. Hubo abrazos entre los mayores y los chicos nos pusimos a correr como desaforados por el patio. Un paso más hacia el campeonato se había dado aquella tarde, que fue especial por la tradicional rivalidad que mantenemos con los hermanos Peruanos.

JEAC.

domingo, 17 de marzo de 2013

50 Años del Sudamericano 63(3)


Para la tercera fecha a nuestra selección le tocó el turno de jugar en Cochabamba, en el estadio Felix Capriles, esta vez enfrentando al representativo de Colombia que venía de perder por goleada frente a Brasil. Ambos equipos con ansias de rehabilitación y en Bolivia con la novedad de que no estuvieron en el partido el maestro Ugarte ni Ramiro Blacutt. Ambos venían golpeados y habían jugado ante Ecuador sin estar totalmente recuperados, así que el técnico prefirió darles descanso para los siguientes partidos. Hubo otros cambios en el equipo, como el debut de Hugo Palenque en la zaga y de Tony Aguirre en la delantera.

Con estos cambios entró Bolivia al césped de Cochabamba dispuesta a ganar a cualquier precio, sin embargo los nervios todavía jugaban en contra de nuestro equipo y  a los cinco minutos de comenzado el partido, Colombia se puso arriba en el marcador con gol de Botero y paralizó a todo el país que ya empezaba a perder las esperanzas.   Poco a poco y en base al empuje del capitán Camacho y de Ausberto García el equipo se fue con todo al arco contrario y consiguió la igualdad a los veinte minutos con gol de Máximo Alcocer  quién también consiguió el segundo a los 39 minutos decretando el marcador final de dos para Bolivia y uno para Colombia. Con esta victoria más que los dos puntos en disputa, el equipo recuperó la confianza.

Como siempre para este partido estuve pegado al radio con la transmisión de “La verdad desde la cancha” de comienzo a fin y me emocioné mucho con los dos goles del Tutula Alcócer. Mientras tanto en La Paz en doble jornada Perú vencía por 2 a 1 a Ecuador y Brasil perdíó por 2 a 0 ante Paraguay  en otra de las grandes sorpresas del campeonato. 

JEAC.

jueves, 14 de marzo de 2013

50 Años del sudamericano 1963(2)

La segunda fecha del Sudamericano del 63, se jugó el 13 de Marzo en Cochabamba con el partido en que Perú dio el campanazo derrotando a la Argentina por dos tantos contra uno. En la Paz el día 14 de Marzo se jugaron dos partidos: Primero Paraguay derrotó a Ecuador por tres tantos contra uno, confirmando así que sería uno de los mejores equipos del torneo, y luego Brasil derrotó a Colombia con un contundente cinco a uno y dando una demostración de buen futbol. Como los equipos participantes eran siete, para esta fecha quedó libre nuestra selección.

Entre tanto continuaban las repercusiones del empate inicial de nuestro equipo y todos pedían la cabeza de Danilo Alvim, y había incertidumbre de lo que podría suceder en los siguientes partidos. El siguiente rival de Bolivia sería Colombia que luego de la amplia derrota ante Brasil, tenía ansias de reivindicación. Las expectativas habían bajado un poco después del empate ante Ecuador y luego de los resultados de la segunda fecha se decía que Brasil sería el campeón a pesar de estar jugando con un equipo alterno, ya que sus principales figuras campeonas del mundial 62 en Chile (Didí, Garrincha, Pelé, Zagalo y otros) no formaban parte de este equipo.

Sin embargo la esperanza es lo último que muere y el aficionado boliviano confiaba en un repunte para el próximo partido. Todos aguardábamos con ansias el siguiente partido de nuestra selección.

JEAC.

domingo, 10 de marzo de 2013

50 Años del sudamericano 1963 (1)

En un día como hoy, hace 50 años atrás, comenzaba la epopeya de una gran hazaña: Bolivia campeón del Sudamericano organizado en las ciudades de La Paz y Cochabamba en nuestro país. Pretenderé apelar a todos mis recuerdos posibles ya que en el año de 1963 yo solo contaba con siete años de edad, pero ya tenía como una gran pasión el fútbol y más aún en aquella oportunidad, en que pude observar, que todo el pueblo boliviano se hizo partícipe de lo que iba a acontecer, quizás palpitando el gran final que iba a tener este acontecimiento para nuestro equipo.

Para la apertura del campeonato y para el debut boliviano, se eligió al rival considerado el más débil de todos, en este caso la selección de Ecuador. Se esperaba una victoria relativamente fácil ante esta selección y que nuestro equipo ganara en confianza para los siguientes partidos. Sin embargo Ecuador mostró un conjunto de mucha garra y con un jugador de gran calidad como era Bolaños quién era lo más parecido a nuestro maestro Ugarte en su mejor época. Fue un partido tenso y emocionante; del 2 a 0 inicial con el que ganábamos cómodamente, se pasó al 4 a 2 con él que el equipo Ecuatoriano nos derrotaba y daba la gran sorpresa de la primera jornada. Sin embargo apareció la garra boliviana comandada por el gran Wilfredo Camacho y a su influjo el equipo se fue con todo al ataque y consiguió el descuento primero y luego el empate precisamente en los pies de Camacho que aprovechó un remate de Max Ramírez que dio en el poste y él estuvo allí en pleno ataque para mandarla al fondo de las redes. En la foto superior, se muestra precisamente el momento del empate que significó el 4 a 4 final con que terminó el encuentro.

Este y todos los partidos yo los viví por transmisión radial, y digo que los viví porque el relato del gran Cucho Vargas nos hacía casi estar presentes a los que no teníamos la suerte de estar en el estadio. Para aquella oportunidad Cucho Vargas formó un gran equipo de transmisión deportiva junto a Lorenzo Carri, Remberto Echeverria (qepd), Mendell Urbach, y otros grandes de la locución deportiva, y era el programa más escuchado no solo en La Paz, sino en el país. 

Nadie quedó contento con este empate y una gran mayoría de la gente estaba decepcionada y se hablaba ya de un sonoro fracaso, de los muchachos de Danilo Alvim que era el brasileño que dirigía nuestra selección. Mientras tanto en Cochabamba, en la inauguración Argentina derrotaba por 4 a 2 a Colombia y Brasil derrotaba por 1 a 0 al Perú. Así comenzaba un 10 de Marzo del año 1963 lo que sería el mayor logro del fútbol boliviano.  (Continuará…) 

JEAC.

sábado, 9 de marzo de 2013

El tamaño de las personas

Una persona es enorme para uno, cuando habla de frente y vive de acuerdo a lo que habla, cuando trata con cariño y respeto, cuando mira a los ojos y sonríe inocente.

Es pequeña cuando solo piensa en si misma, y le hace creer a los otros que piensa en ellos, cuando se comporta de una manera poco gentil, cuando no apoya, cuando abandona a alguien justamente en el momento en que tendría que demostrar lo que es mas importante entre dos personas: la Amistad, el compañerismo, el cariño, el respeto, El celo y asimismo el amor.

Una persona es gigante cuando se interesa por tu vida, cuando busca alternativas para tu crecimiento, cuando sueña junto contigo… cuando trata de entenderte aunque no piensen igual.

Una persona es grande cuando perdona, cuando comprende, cuando se coloca en el lugar del otro, cuando obra no de acuerdo con lo que esperan de ella, pero de acuerdo con lo que espera de si misma.

Una persona es pequeña cuando se deja regir por comportamientos clichés. Cuando quiere quedar bien con todos, cuando maneja a la gente como un titiritero y lamentablemente siempre hay gente que no tiene convicciones y se deja manejar….

Una misma persona puede aparentar grandeza o pequeñez dentro de una relación, puede crecer o disminuir, en un corto espacio de tiempo.

Una decepción puede disminuir el tamaño de un amor que parecía ser grande.
Una ausencia puede aumentar el tamaño de un amor que parecía ser ínfimo.
Una decepción puede terminar con el respeto por alguien…de muchos… Una acción correcta puede enaltecer a otros.

Es difícil convivir con esta elasticidad: Las personas se agigantan y se encogen a nuestros ojos. Ya que nosotros no juzgamos a través de centímetros y metros, sino de acciones y reacciones, de verdades o falsedades, de expectativas y frustraciones.

Una persona es única al extender la mano, y al recogerla inesperadamente, se torna otra.

El egoísmo unifica a los insignificantes, a los perdedores, a los falsamente llamados diplomáticos.

No es la altura, ni el peso, ni la belleza, ni un titulo o mucho dinero lo que convierte a una persona en grande… Es su honestidad, su decencia, su amabilidad y respeto por los sentimientos e intereses de los demás. Por su sensibilidad sin tamaño…

Versión de escrito por William Shakespeare.

JEAC.

miércoles, 6 de marzo de 2013

Días de Colegio 3

¿Quién no se enamoró alguna vez de su maestra? Ahora después de tanto tiempo y recordando lo que fue para mi aquél primer año de colegio en el kinder, descubro que sí…que yo también estaba enamorado de mi primera maestra…de su dulzura, de su paciencia de su forma de enseñar. Además ya conté que la Miss Teresa, como la llamábamos, era una señora muy linda. Que feliz me puse al recordar aquella época y descubrir mi amor por mi maestra y tener plena conciencia de que aquello no era nada malo y más bien algo muy común entre los muchachitos de esa edad.

Encontré una canción de autoría de Joan Manuel Serrat grabada solamente en Catalán y que titula “Canco per a la meva maestra”, y luego de buscar mucho pude dar con la traducción al idioma español. Era como yo me lo imaginaba…un canto a los primeros años de colegio y que se aviene muy bien a lo que estoy tratando de relatar en esta serie de Días de Colegio. Como anillo al dedo vino esta canción y aquí la pongo para solazarnos con la poesía de Serrat y recordar más de aquellos años maravillosos:

Canción para mi maestra (Joan Manuel Serrat)

Érase una vez... usted, maestra,
y su mundo de tintero y banco,
pizarra y delantal blanco.
Buenos días, por la mañana, nos decíais, en pie
entre dos fotografías y una cruz,
una oración y una canción
y un beso en la mejilla.

Buenos días, maestra...

Pero usted nunca supo, maestra,
que cuando quería que cantara
que tres por una eran tres
mis ojillos arañaban francamente
las rodillas que púdicamente
usted apretaba y apretaba,
pero un número no vale
lo que una piel rosada.

A pesar de que nos hacía ir a la iglesia
y me quitaba el regaliz aquél
era un mundo pequeño y maravilloso,
un mundo de tizas de colores
que usted pintaba
y usted borraba...
Sólo usted, rodeada de curas,
le daba la razón de llamarse "niños"
a un mundo de cuatro palmos.

Y si alguna vez piensa en mí, maestra,
que de sus ojillos azules
nazca siempre aquella paz
que me hacía un poco más dulce la escuela
y que no se le haga un nudo en la garganta
diciendo: «qué han hecho...», «a dónde
han llevado a mi puñado de pequeños...»

porque usted no sabía, maestra,

que el mundo es siempre el mundo,
que el hombre siempre es el hombre,
pero no es lo mismo
su olor,
¡ay! maestra,
que el aire de la calle.

JEAC.

domingo, 3 de marzo de 2013

La humanidad te necesita

- Si la nota dijera: "No es una nota la que hace la música"...No habría sinfonía.
- Si la palabra dijera: "No es una palabra la que puede hacer una página"...No habría libros.
- Si la gota dijera: "No es una gota la que puede hacer un río"...No habría océanos.
- Si el grano dijera: "No es un grano de trigo el que puede sembrar un campo"...No habría cosechas.
- Si el hombre dijera: "No es solo un gesto de amor lo que puede salvar la humanidad"...Jamás habría justicia, paz, dignidad y felicidad en la tierra.

Como la sinfonía necesita cada nota.
Como el libro necesita cada palabra.
Como la cosecha necesita cada grano de trigo.
Como el océano necesita cada gota de agua.
La Humanidad entera te necesita.
Pues donde estés eres único y por lo tanto insustituible...

Autor desconocido.

JEAC.