martes, 31 de diciembre de 2019

2020

¡Atención a los pasajeros! ¡Es hora de renovar su pasaporte!
Estaremos, dentro de poco, empezando otro viaje, con un tiempo previsto en todo el trayecto de 365 días. Sellen su pasaporte, definan su destino y embarquen en la plataforma 2020.
Quien tenga penas, resentimientos, rencores y tristezas antiguas en el equipaje, por favor descárguelas en el Balcón 2019.
Recomendamos el uso de los zapatos de buena voluntad y las camisas del optimismo, evitando, durante el viaje, las ropas de la competitividad insana y los nudos de corbata de la ambición desenfrenada.
Los pasajeros que porten la sonrisa en los labios, el corazón abierto y las manos listas para construir tendrán asiento preferencial al lado de la ventana de la felicidad.
Solicitamos a todos que aprieten el cinturón de la esperanza y recomendamos que nadie, en ninguna hipótesis, utilice la salida de emergencia durante el viaje.
Si hay períodos de turbulencia, mantengan la calma y la confianza en el piloto de esta aeronave, el Gran Comandante Universal.
En cualquier situación de miedo o desesperación, cuente también con nuestra atención de a bordo realizada permanentemente por nuestros ángeles del espacio que estarán al lado de cada pasajero
Recomendamos durante todo el trayecto, actitudes de solidaridad, de atención y cariño, principalmente, con los niños y ancianos, lo que garantiza la participación en nuestro programa de kilometraje.
El aire de las cabinas, en virtud de las acciones del hombre, está extremadamente seco, por eso, sugerimos la ingestión de agua durante todo el viaje.
Además, moderación con los alimentos grasos. Recomendamos también ejercicios físicos con el ejercicio de las piernas, brazos y pies, evitando las hinchazones perjudiciales a la salud.
Es importante recordar, que, aunque hay gente viajando en clases diferentes, nada asegura que en el próximo viaje los pasajeros tendrán derecho a los mismos asientos.
Por lo tanto, respeto y buena relación con cada compañero de viaje, independientemente de la clase a la que pertenezca, será motivo de evaluación en el momento del check-out. Para esto recordamos utilizar la credencial de la amistad y las palabras de agradecimiento y comprensión.
Tendremos como ya es conocimiento de todos, varias escalas durante nuestro trayecto, lo que implica la entrada y salida de personas, cabe recordar a todos la confianza continua en el Comandante Universal.

¡A todos, un excelente viaje!

FELIZ AÑO NUEVO 2020

Tomado de la web.


Publicado por JEAC.

miércoles, 25 de diciembre de 2019

Navidad 2019


Navidad es volver a nacer,
devolver bien por mal
y cambiar odio por amor,
dudas por fe y tinieblas por luz.
Acoge a Dios en tu alma
y entonces te será más fácil acercarte
al distante y al distinto.
Celebra esta fiesta en familia
consciente de todos tus dones
y dando gracias por múltiples bendiciones.
Navidad es compartir con los menesterosos
y, al mismo tiempo,
amar de verdad a los que tienes cerca.
Apela a lo mejor de ti
y quiere más a los que viven contigo,
reconcíliate y estrecha los lazos del amor.
Navidad es perdonar con el alma
a alguien que te haya lastimado.
No es un ser malo,
es un hijo de Dios equivocado.
También es perdonarte con tierna compasión
y sanar el pasado libre de culpas,
odios y rencores.
Navidad es creer que el futuro nunca es incierto
si llenas de amor el presente.
Navidad es Dios en tu corazón.

Feliz Navidad
Autor desconocido.

Publicado por JEAC.


 

sábado, 14 de diciembre de 2019

A veces...


A veces, solo aveces...
Retirarse no es rendirse,
ni estar en contra es agredir.
Cambiar no es hipocresía
y derrumbar no es destruir.
Estar a solas no es apartarse,
y el silencio no tener qué decir.
Quedarse quieto no es por pereza, 
ni cobardía es sobrevivir.
Sumergirse no es ahogarse,
ni retrocedes para huir.
No se desciende trastabillando,
ni el cielo ganas por bien sufrir.
Y las condenas no son eternas,
ni por perdones vas a morir.
A veces, solo a veces...
Hace falta lograr soltarse,
izar las velas, abandonarse,
dejar que fluya, que el viento cambie,
cerrar los ojos y enmudecer.

Autor desconocido.

Publicado por JEAC.




miércoles, 4 de diciembre de 2019

Adviento 2019


Estamos en Adviento. Es la temporada de anticipación cuando terminamos otro año tumultuoso en el planeta Tierra.
Me parece irónico y un poco melancólico. A medida que nos acercamos al solsticio de invierno, (verano en el hemisferio sur) una luz de celebración debería iluminar la oscuridad.
Sin embargo, para demasiados, la luz es tenue o inexistente. No tiene que ser así.
Nuestro mundo occidental está radiante y lleno de anuncios de televisión deslumbrantes, exhibiciones de luces intermitentes y, a veces, llamativas para mantener la temporada. ¿Pero de qué honor es alegrarse cuando tantos están tristes, cansados, preocupados, hambrientos, sin hogar e indefensos?
Entra en un verdadero Adviento.
Es la antítesis de la comercialización navideña lo que golpea nuestros sentidos en casi todos los aspectos que los hombres locos de marketing conspiran para lanzarnos. Deseamos oro, incienso y mirra al estilo del siglo XXI.
Tal vez necesitamos una epifanía antes de la Epifanía para vivir las festividades correctamente. Parece que hemos convertido el axioma, una vez admirado, "Es mejor dar que recibir" en materialismo. Necesitamos enderezar el barco antes de hundirnos.
Aunque es una tradición cristiana exclusiva, el Adviento es un tiempo inclusivo, activo, intencional e icónico para todos. Adviento es tanto una acción como un preludio de la Navidad. En verdad, el significado de Adviento precedió a cualquier aplicación contemporánea.
Más que una preparación para volver a conectarnos con Dios, algunos eruditos bíblicos creen que el Adviento  promovía  40 días de ayuno antes de la Epifanía. Eso brilla una nueva perspectiva del día sagrado.
Pido disculpas por el sermón.
Espero que con estas pocas palabras, otros también capten el significado de este Adviento de estar vigilantes, alertas, en amor, paz y servicio.
No hay lugar en la posada durante el Adviento para la codicia, el poder, la posición, la ostentación, la riqueza, la avaricia y el odio. La contemplación, la meditación, la oración, la consideración, la caridad, la humildad y la asistencia a los necesitados cumplen el mensaje y el significado del Adviento.
Entonces, ¿cuál es mi punto? El esfuerzo de buena voluntad prepara el escenario para una oportunidad aún mayor de ser personalmente bondadoso y generoso.
Ve más despacio. Tómate el tiempo para darte cuenta de quién eres y dónde estás. Las oportunidades de ayudar abundan por todas partes.
Una vez que estés consciente, se valiente y da el siguiente paso. Hazlo de  manera que satisfaga una necesidad inmediata de los demás. No es tan difícil.
La espontaneidad sazona los dones de la caridad y la generosidad.
La practicidad los envuelve, los hace íntimos.
Aquí hay algunas sugerencias iniciales: Visita a los enfermos. Envía una nota o tarjeta a las personas en hogares de ancianos. Honra a las viudas y viudos  nada más que con tus oídos. Ten en cuenta la necesidad de los que te rodean.
Aunque demasiado humilde para decirlo, mi buena esposa fue un ejemplo perfecto para nosotros las últimas Navidades. Mientras conducíamos nuestro vehículo hacia una luz roja en el centro de Harrisonburg, Virginia, en una noche fría y tempestuosa, notamos a una mujer sin hogar con un cartel de cartón en la acera de la esquina.
Ofrecí una botella de agua que normalmente llevo para tal ocasión. Cuando Neva vio que la joven no tenía guantes, reaccionó al instante. Sin dudarlo, mi esposa se quitó los guantes y se los entregó a la mujer.
Adviento se presentó y Neva respondió.
¿Cómo podemos dejar que nuestra luz brille en la oscuridad de hoy?

Bruce Stambaugh


Publicado por JEAC.

miércoles, 27 de noviembre de 2019

El reloj


Un padre antes de morir le dijo a su hijo: "éste es un reloj que tu abuelo me dio, y tiene más de 200 años. Pero antes de que te lo entregue, te pido que vayas a la relojería del centro, y diles que quieres venderlo, así ves lo mucho que vale."
El hijo fue, luego regresó con su padre y dijo: "el dueño de la relojería me lo paga 5 dólares porque dice que es viejo."
El padre le dijo: "ve a la cafetería y pregúntale al dueño cuánto te da."
El hijo fue, luego regresó, y dijo: "también me lo paga 5 dólares papá."
"Por último ve al museo y muéstrale ése reloj al director."
Se fue luego regresó, y le dijo a su padre: "me dijo que cuesta un millón de dólares!!!
El padre le dijo: "quería hacerte saber que en el lugar correcto sabrán tu VALOR de una manera correcta. No te pongas en el lugar equivocado, y si lo haces, no te enojes si no te valoran.
Quien sabe tu valor es quien te aprecia, no te quedes en un lugar que no te conviene"

Conoce tu valor!

Autor desconocido.


Publicado por JEAC.

sábado, 16 de noviembre de 2019

¿Cuantos años no tienes?


A raíz de escuchar al señor Helios Herrera en un vídeo, me he puesto a pensar en lo que explica.
¿Cuántos años tiene usted? –pregunta- y las personas responden, según es costumbre, el número de años que han trascurrido desde que nacieron hasta la actualidad.
- Tengo veinte años, cuarenta años, sesenta y tres años…
- No. Usted no tiene esos años. Esos son los que YA NO TIENE -dice.
A veces, es conveniente que alguien te haga ver lo que crees que estás viendo, pero que lo estás viendo sin darte cuenta. O que te digan lo mismo con otras palabras u otro enfoque para que lo veas bien.
Los años transcurridos son los que ya pasamos, los que se terminaron, los que no volverán, los que se han restado de nuestra vida.
Y el consumo y la suma son imparables. Cada segundo que pasa va engordando los años que no tenemos, y nos va dejando menos por disfrutar y vivir.
Conozco varias personas que cuando leen la prensa lo primero que miran es la página donde aparecen las esquelas de los fallecimientos del día anterior, y la ojean con curiosidad pero sin reflexión.
Esas personas difuntas ya no viven, ya acabaron su oportunidad de disfrutar de la vida.
Nosotros aún seguimos, pero… ¿somos conscientes de que estamos vivos, estamos en la vida, podemos vivir?
Los años transcurridos son físicamente irrecuperables, aunque nos queden los recuerdos y las enseñanzas, pero lo importante es el ahora continuo que es la vida, el ahora que va consumiendo poco a poco lo que teníamos reservado en el almacén que llamamos futuro.
Cada segundo que pasa es un segundo menos que nos queda.
Somos capaces de coser el cojín roto porque pierde el relleno; somos capaces de arreglar el grifo que pierde gotas de agua; somos capaces de ponernos a buscar cualquier objeto que hayamos perdido, aunque sea tan simple como un alfiler, pero… ese perder continuamente los segundos… ¿lo solucionamos?
Sí, ya lo sé, la vida va a pasar y se va a gastar de todos modos, pero eso no es lo mismo vivirla que “perderla”.
Perderla es desatenderla, o no sacarle todo el jugo, o no hacer de ella un sitio digno y confortable en el que estar mientras dure, o no responsabilizarse conscientemente de ella.
Quizás deberíamos cambiar la pregunta de “¿Cuántos años tienes?” por la de “¿Cuántos años te quedan por vivir?”.
Nos podemos sorprender con la respuesta.
Quizás deberíamos dedicarle un tiempo a esta cuestión y hacer algo.
Lo que cada uno decida hacer.
Te dejo con tus reflexiones…

Tomado de la web.


Publicado por JEAC.

martes, 5 de noviembre de 2019

La vida...


La vida te desilusiona para que dejes de vivir de ilusiones y veas la realidad.
La vida te destruye todo lo superfluo, hasta que queda sólo lo importante.
La vida no te deja en paz, para que dejes de pelearte, y aceptes todo lo que ES.
La vida te retira lo que tienes, hasta que dejas de quejarte y agradeces.
La vida te envía personas conflictivas para que sanes y dejes de reflejar afuera lo que tienes adentro.
La vida deja que te caigas una y otra vez, hasta que te decides a aprender la lección.
La vida te saca del camino y te presenta encrucijadas, hasta que dejas de querer controlar y fluyes como rio.
La vida te pone enemigos en el camino, hasta que dejas de reaccionar.
La vida te asusta y sobresalta todas las veces que sean necesarias, hasta que pierdes el miedo y recobras tu fe.
La vida te quita el amor verdadero, no te lo concede ni permite, hasta que dejas de intentar comprarlo con baratijas.
La vida te aleja de las personas que amas, hasta que comprendes que no somos este cuerpo, sino el alma que él contiene.
La vida se ríe de ti tantas veces, hasta que dejas de tomarte todo tan en serio y te ríes de ti mismo.
La vida te rompe y te quiebra en tantas partes como sean necesarias para que por allí penetre la luz.
La vida te enfrenta con rebeldes, hasta que dejas de tratar de controlar.
La vida te repite el mismo mensaje, incluso con gritos y bofetadas, hasta que por fin escuchas.
La vida te envía rayos y tormentas, para que despiertes.
La vida te humilla y derrota una y otra vez hasta que decides dejar morir tu EGO.
La vida te niega los bienes y la grandeza hasta que dejas de querer bienes y grandeza y comienzas a servir.
La vida te corta las alas y te poda las raíces, hasta que no necesitas ni alas ni raíces, sino sólo desaparecer en las formas y volar desde el Ser.
La vida te niega los milagros, hasta que comprendes que todo es un milagro.
La vida te acorta el tiempo, para que te apures en aprender a vivir.
La vida te ridiculiza hasta que te vuelves nada, hasta que te haces nadie, y así te conviertes en todo.
La vida no te da lo que quieres, sino lo que necesitas para evolucionar.
La vida te lastima, te hiere, te atormenta, hasta que dejas tus caprichos y berrinches y agradeces respirar.
La vida te oculta los tesoros, hasta que emprendes el viaje, hasta que sales a buscarlos.
La vida te niega a Dios, hasta que lo ves en todos y en todo.
La vida te acorta, te poda, te quita, te rompe, te desilusiona, te agrieta, te rompe... hasta que sólo en ti queda  AMOR.

Bert Hellinger


Publicado por JEAC.

lunes, 28 de octubre de 2019

Dónde está Dios?


La reflexión que vas a leer a continuación no es solamente un conjunto de palabras correctamente ordenado, sino la esencia de una reflexión o de una experiencia.
Si la aprendes de memoria, estará bien; pero solamente surte su efecto si la lees con el corazón, y si la dejas que se repita dentro de ti para que la comprendas y la integres.
Déjala que peregrine dentro de ti… que se expanda… que te llene… que te hable más allá de lo condensado…

CREEMOS QUE DIOS NOS VE DESDE ARRIBA, PERO EN REALIDAD NOS VE DESDE DENTRO.

Autor desconocido.


Publicado por JEAC.

sábado, 19 de octubre de 2019

Envejeciendo...


Señor, tu sabes que estoy envejeciendo.
* Ayúdame a pensar que no soy un pedazo inútil en el movimiento de la vida. Reconozco que no tengo las mismas capacidades físicas que me animaron en la juventud, ni los mismos reflejos y disposición. Sin embargo, ayúdame a no desanimarme.
* No me dejes enmohecer, como la flor quemada por el sol.
* No permitas que tenga la idea fija de estar hablando de mí el tiempo entero.
* Impídeme estar repitiendo los detalles interminables.
* Dame rapidez para que sea objetivo.
* Cierra mi boca cuando esté propenso a hablar de mis dolores y de mis sufrimientos. Ellos están aumentando con el paso de los años, y mi deseo de hablar de ellos aumenta todos los días.
* Enséñame a dialogar, sin hacerme excesivamente el hablador, para no causar indisposición en los demás.
* No permitas concebirme limitaciones innecesarias. Pon mis manos en el trabajo para que todavía elabore las creaciones en el campo de la música, de la pintura, de la jardinería, de la cerámica, etc.
* Enséñame la mejor ocupación para el tiempo que dispongo. Un tiempo que, en los días de la juventud, reclamaba no tener.
* Permíteme levantarme todos los días dispuesto a aprender alguna cosa más. Puede ser una forma diferente de usar el cepillo, una breve poesía, una enseñanza, una receta sorprendente.
* Deseo ser jovial sin parecer tonto e imprudente.
* Tórname solícito pero no curioso. Útil, pero no dominador.
* Deseo ser un abuelo que pueda contribuir con la educación de mis nietos y no el deseducar, con el único propósito que ellos aprecien salir conmigo, por las tardes en la primavera.
* Enséñame la lección gloriosa de que, a veces, yo puedo estar equivocado. Aprendí mucho, guardo experiencias preciosas, pero no tengo el derecho de despreciar los progresos de la era moderna y de la ciencia. Después de haber adquirido un conocimiento enorme de sabiduría y experiencia, me da una pena enorme no poder usarla totalmente, sin crear las turbaciones en los otros.
* Si la dependencia física se vuelve necesaria, ayúdame Dios mío, a tener paciencia conmigo mismo, soportando el cuerpo que tanto me sirvió aquí. Con él bailé, canté, viajé, viví dulzuras, los momentos buenos y malos, por lo tanto ayúdame a continuar amándolo.

Autor desconocido.


Publicado por JEAC.

viernes, 4 de octubre de 2019

Adversidad



Las personas más grandes que conoces probablemente han vivido vidas difíciles, han superado grandes obstáculos o han conseguido retos que parecían imposibles.
La adversidad nos hace grandes.
Cada dificultad te ayuda a aprender, ampliar tu visión, superarte, crecer.
Cuando un obstáculo se cruce en tu camino, aprende a mirarlo de frente y preguntarle:
¿qué me quieres enseñar?


Los obstáculos te ayudan a probar tu grandeza.

Laura Chica.


Publicado por JEAC.

martes, 24 de septiembre de 2019

Mantén vivo el niño que fuiste


En mi opinión, nos han engañado quienes nos han hecho creer que cada vez que pasamos de una etapa a otra en nuestra vida tenemos que abandonar la anterior. No es necesario. Incluso es conveniente mantenerlas, porque cada una de ellas tienen cosas buenas que es mejor no perder, que es mejor no renunciar a ellas.
En esos exámenes de conciencia que hacemos de vez en cuando –que son exámenes de nuestro pasado- tenemos tendencia a la añoranza. Y en esas cosas que añoramos hay algunas que son imposibles de recuperar, pero hay otras que fuimos dejando, sin saber porqué, sin darnos cuenta, y ahora que las podemos ver lejos de nosotros nos damos cuenta de cuánto nos gustaría recuperarlas.
Por ejemplo, en mi caso -y eso que afortunadamente sigo teniendo un excelente sentido del humor- echo en falta más risas todavía, más alegría, más desparpajo, más espontaneidad, más predisposición a la broma, a la carcajada sin pudor, a la risotada escandalosa; echo en falta esas lágrimas de la risa y el dolor en la tripa de tanto reírme…
Echo en falta la capacidad de sorprenderme y emocionarme que tuve en otras etapas de mi vida, la emoción de los quince años, la locura de los veinte, la ilusión de los treinta, echo en falta la aventura, sentirme vivo en algo que fue natural y espontáneo en su momento y ahora parece que desapareció.
Nos han hecho creer –no sé quién- que los adultos tenemos que ser serios, que la vida es seria, que lo que se vaya a hacer –sea lo que sea- es serio; rodeamos de gravedad y severidad la mayoría de nuestros actos.
Se nos va poniendo día a día una seriedad pétrea en el rostro que es una pesada máscara, desagradable, que soportamos en muchas ocasiones sin ni siquiera llegarnos a plantear que nos la podemos quitar y estrellarla contra el suelo, que podemos recuperar a todos los que fuimos y ya no somos.
Se nos va la vida sin ponerle color y más sonrisas. Se nos va sin que nos atrevamos a decir “basta ya”, sin que tomemos muchas de esas decisiones que nos están esperando, sin que recuperemos a ese que nos gustaría recuperar: el que fuimos y nos gustaría seguir siendo.
Tal vez nos hemos construido sin darnos cuenta una vida que carece de una parte que es muy importante en la vida –o tal vez las circunstancias nos han obligado a construirla- pero es muy posible que nos hayamos quedado instalados en una comodidad desganada en la que pasan menos cosas de las que nos gustaría que pasaran. Y no me refiero a cosas externas, sino a cosas internas, a cosas que le pasen a nuestra alma.
Más que necesario es imprescindible recuperar y mantener viva la forma de ser de nuestros mejores momentos, alentar las mejores cualidades y capacidades, darse permiso para desdramatizar la vida y poner flores en forma de optimismo, sonrisas, vitalidad, ganas de compartirse, de comunicarse desde el corazón, de empaparse de emociones.
Es bueno recuperar el niño que fuimos, ese que era feliz sin poner condiciones y se permitía disfrutar continuamente. Y si no hemos podido ser ese niño, es el momento de serlo.
Te dejo con tus reflexiones…

Tomado de la web.


Publicado por JEAC.

lunes, 16 de septiembre de 2019

50 reglas de oro para la vida

Son 50 pero vale la pena leerlas y analizarlas una a una…


1. Nunca saludes de mano a nadie sin ponerte de pie.
2. En una negociación, nunca hagas la primer oferta.
3. Si te confían un secreto, guárdalo.
4. Regresa con tanque lleno el auto que te prestaron.
5. Haz las cosas con pasión o mejor no las hagas.
6. Cuando saludes de mano, hazlo firme y mirando a los ojos.
7. Vive la experiencia de hacer un viaje solo.
8. Nunca rechaces una pastilla de menta, las razones son obvias.
9. Acepta consejos si quieres llegar a viejo.
10. Acércate a comer con la persona nueva en la oficina.
11. Cuando le escribas a alguien enojado, termina y vuelve a leerlo, después bórralo y hazlo de nuevo.
12. En la mesa no hables de trabajo, política o religión.
13. Se Justo, defiende a los que son abusados sin abusar.
14. Escribe tus metas y luego trabaja por ellas.
15. Defiende tu punto de vista sin ofender ni insultar, se tolerante y respetuoso ante el ajeno.
16. Llama y visita a tus padres, hijos, familiares y amigos, no pierdas el tiempo esperando que ellos lo hagan primero.
17. Nunca te arrepientas de nada, aprende de todo.
18. En momentos o días de soledad, relájate, disfruta y aprende.
19. El honor y la lealtad son básicos en tu personalidad.
20. No le prestes dinero a quien sabes que no te pagará.
21. Cree en algo.
22. Tiende tu cama al levantarte por las mañanas.
23. Canta en la ducha.
24. Cuida una planta o un jardín.
25. Observa el cielo cada vez que puedas.
26. Descubre tus habilidades y explótalas.
27. Ama tu trabajo, o déjalo.
28. Pide ayuda cuando la necesites.
29. Enséñale un valor a alguien, de preferencia a un niño.
30. Valora y agradece a quien te tienda la mano.
31. Se amable con tus vecinos.
32. Hazle el día más alegre a alguien.
33. Compite contigo mismo.
34. Regá
late algo mínimo una vez al año.
35. Cuida tu salud.
36. Saluda con una sonrisa siempre.
37. Piensa rápido, pero habla despacio.
38. No hables con la boca llena.
39. Lustra tus zapatos y corta tus uñas.
40. No opines sobre temas que desconozcas.
41. Nunca maltrates a un animal.
42. Alza la voz ante las injusticias.
43. Nunca pierdas la maravillosa oportunidad de quedarte callado.
44. Reconoce a alguien su esfuerzo.
45. Se humilde ante todo.
46. Nunca olvides de donde vienes.
47. Viaja cada vez que te sea posible.
48. Cede el paso.
49. Baila bajo la lluvia.
50. Busca tu éxito, sin desistir.


Tomado de la web.


Publicado por JEAC.

viernes, 6 de septiembre de 2019

Cambiar el mundo

Se cuenta que hubo un niño muy sensible e inteligente, que solía preocuparse y lamentarse por el estado en el que se encontraba el mundo.

Más adelante, durante su juventud, empezó a protestar y a quejarse por las políticas impulsadas por el Gobierno de su país.

Frustrado por no conseguir los cambios que deseaba, al llegar a la edad adulta centró sus críticas y juicios en su mujer y sus hijos. Fue sin duda una vida marcada por la lucha, el conflicto y el sufrimiento.

Sin embargo, al cumplir 80 años y aquejado de una enfermedad terminal, experimentó una revelación que transformó su manera de ver la vida. Tanto es así, que horas antes de fallecer dejó por escrito el epitafio que más tarde se escribiría sobre su tumba:

"Cuando era niño quería cambiar el mundo. Cuando era joven quería cambiar a mi país. Cuando era adulto quería cambiar a mi familia. Y ahora que soy un anciano y que estoy a punto de morir, he comprendido que si hubiera cambiado yo, habría cambiado todo lo demás".

Tomado de la web.


Publicado por JEAC.

martes, 27 de agosto de 2019

Miseria


"Apegado a la tierra que cubrirá mi cuerpo algún día, desbordando mi cariño por los seres míos y hacia todos los niños. Envuelto en melancolía por el mundo, llegando hasta el abismo más profundo. Mi corazón contempla los peligros que amenazan a los humanos, y al ver su dolor, me arrodillo por amor implorando por todos mis hermanos. Una juventud desorientada y adultos irresponsables que no les importa nada, se van agotando en placeres ficticios mientras siguen cavando su tumba esclavo de los vicios. Hacia donde va el mundo hacia el abismo, si reina la ambición y el egoísmo, ya nunca se piensa Señor en tu divino ejemplo, se calumnia al justo y se rechaza al bueno, caminamos por la vida observando con el ojo ajeno aun acabando de salir del templo. Mi espíritu abrumado lo siente, impaciente y encerrado en su cárcel de materia, tiembla y se espanta al ver tanta miseria."

Luis Novelo.


Publicado por JEAC

domingo, 18 de agosto de 2019

Por qué gritamos cuando estamos enojados?


Cuenta una Historia Tibetana, que un día un viejo sabio preguntó a sus seguidores lo siguiente: – ¿Por que la gente se grita cuando están enojados?
Los hombres pensaron unos momentos:
-Porque perdemos la calma – dijo uno – por eso gritamos.-
-Pero ¿por qué gritar cuando la otra persona está a tu lado? – preguntó el sabio – No es posible hablarle en voz baja? ¿Por qué gritas a una persona cuando estás enojado?
Los hombres dieron algunas otras respuestas pero ninguna de ellas satisfacía al sabio.
Finalmente él explicó:
-Cuando dos personas están enojadas, sus corazones se alejan mucho. Para cubrir esa distancia deben gritar, para poder escucharse. Mientras más enojados estén, más fuerte tendrán que gritar para escucharse uno a otro a través de esa gran distancia.
Luego el sabio continuó:
– ¿Qué sucede cuando dos personas se enamoran? Ellos no se gritan sino que se hablan suavemente ¿por qué? Sus corazones están muy cerca. La distancia entre ellos es muy pequeña.
El sabio sonrió y dijo:
– Cuando se enamoran más aún, qué sucede? No hablan, sólo susurran y se vuelven aun más cerca en su amor. Finalmente no necesitan siquiera susurrar, sólo se miran y eso es todo.
Así es cuan cerca están dos personas cuando se aman...
Luego dijo:
-Cuando discutan no dejen que sus corazones se alejen, no digan palabras que los distancien más, puede llegar un día en que la distancia sea tanta que no encuentren más el camino de regreso...

Autor desconocido.


Publicado por JEAC.

viernes, 9 de agosto de 2019

Acompañar


1. Acompañar se trata de estar presente para el dolor de otra persona; no de hacer que su dolor desaparezca.

2. Acompañar se trata de ir al desierto del alma con otro ser humano; no de creer que somos responsables de encontrar la salida.

3. Acompañar se trata de honrar el espíritu; no de enfocarse en el intelecto.

4. Acompañar se trata de escuchar con el corazón; no de analizar con la cabeza.

5. Acompañar es dar testimonio de las luchas de otros; no de juzgar o dirigir esas luchas.

6. Acompañar se trata de caminar al lado; no de conducir o ser conducido.

7. Acompañar se trata de descubrir los dones del silencio sagrado; no significa llenar con palabras cada momento.

8. Acompañar al que sufre se trata de quedarse quieto y en silencio; no de querer moverse frenéticamente hacia adelante.

9. Acompañar se trata de respetar el desorden y la confusión; no de imponer orden y lógica.

10. Acompañar se trata de aprender de otros; no de enseñarles.

11. Acompañar se trata de tener una actitud de curiosidad y no de expertos.

Alan D. Wolfet


Publicado por JEAC.

lunes, 29 de julio de 2019

Confía en ti


Quizá nadie te lo ha dicho, pero eres más de lo que crees. Eres más de lo que ves en ti.
Tienes más capacidades de las que te empeñas en creer que tienes. Te haces daño con tu percepción limitada, con tus inseguridades, con tu tendencia a ver lo peor de ti, lo que no tienes, lo que aún no sabes. Eres mucho más que eso.
Eres lo que te permitas ser.
Ábrete a ti, aprende a mirarte con amor, a creer en ti y en tu potencial, en todo lo que ya has conseguido hasta llegar aquí, y en lo que te queda por conseguir.

Confía en ti. En palabras de Waitley:
«No es lo que eres lo que te detiene, sino lo que piensas que no eres».

Laura Chica de su libro 365 Citas contigo.


Publicado por JEAC.

domingo, 21 de julio de 2019

Ya no me veo


Ya no me veo contestando cada insulto que me dan. Simplemente he aprendido que el insulto no es para mí, es para la persona misma que me lo está dando.

Ya no me veo escuchando cada queja de la gente alrededor. He aprendido a respetarme y a decidir no ser el basurero emocional de nadie.

Ya no me veo escuchando a alguien y buscando en mí una historia más trágica, para demostrarle que a mí también me ha pasado lo que a él o a ella. Ahora, solo escucho y limpio memorias. Por algún razón me lo están compartiendo.

Ya no tomo responsabilidades que no me corresponden, ni explico, el por qué no lo hago.

Ya no discuto con la gente para salvar mi honor o mi nombre. Eso, es solo parte del ego que me ha llevado a equivocarme y que al final, no le ha aportado mucho a mi vida. El que crea que tengo honor que lo crea, y el que no, lo respeto y bendigo su camino.

Ya no me veo angustiad@ por qué alguien deja de hablarme o alguien ya no me quiere en su vida. Es su vida y es su espacio, por lo tanto respeto la decisión, de todas maneras si ya no me desea cerca, no creo que tenga mucho para aportarme. Al final son elecciones y esta bien.

Ya no me veo preguntando aquí y allá por algo que quiero saber. Si lo quiero saber, voy a la fuente.

Ya no me veo triste, enoja@, frustrad@, deprimid@ o cualquier emoción que baje mi vibración. No por qué no vaya a volver a sentirlas, sino por qué desgasto esas emociones tan rápido como puedo y me enfoco en volver a tomar vuelo para ser quien realmente soy.

Hoy, ya no veo cómo antes, ni siquiera como ayer, así que día a día soy mi mayor experimento, mi mayor investigación, mi mayor hallazgo.

Todos los días, me descubro, me callo y miro dentro de mí. No es que menosprecie a los demás, es que estoy muy asombrad@ de mí mism@ y ahí, es donde deseo mi energía para vivir. Para enfocarme en mi mism@.

Ya no me veo caminando por la vida sin luz, sin Dios, sin magia, sin amor incondicional. Ya no me veo pensando que Dios está afuera de mí y que el cosmos es algo lejano que nunca conoceré.

Hoy, ya no me veo como me veía hace unos días, semanas, meses o años, y es que decidí que cada día era necesario evolucionar y que cada día podía usar mi varita mágica para obtener lo que me hace feliz.

Tomado de la web.


Publicado por JEAC.

viernes, 12 de julio de 2019

Los otros también tienen sus circunstancias


En mi opinión, a veces vemos las cosas tan obstinadamente estancados en nuestro punto de vista, y tan desde nuestra tensión o frustración, o desde nuestro ego, que actuamos como si fuésemos el centro del mundo, lo único que importa.
A veces se nos olvida que los otros, el resto de esta nuestra especie que se conoce como Humanos, también tiene unas dudas similares a las nuestras, que compartimos con ellos algunos de nuestros miedos, pasamos por parecidas frustraciones, que igual que ellos tenemos conflictos con muchas cosas al mismo tiempo, y que tenemos que resolver nuestra vida como sea para sobrevivir y poder seguir adelante.
Ellos también se plantean qué estudiar, su vida amorosa, su relación con el resto de las personas, el trabajo, las facturas, la soledad, lo que duele, los sueños incumplidos, la vejez, el paso imparable de la vida, el futuro…
Compartimos mucho pero, al mismo tiempo, nos cruzamos con miles de personas a las que no miramos a la cara. A veces somos conscientes de que alguien necesita una atención o una palabra de ánimo pero lo eludimos. Lloramos por el lejano pero no lloramos con el cercano.
Pasan a nuestro lado, laten como nosotros, respiran el mismo aire, pero no son nada ni nadie para nosotros. No decimos –ni ellos ni nosotros- “buenos días”, ni preguntamos con verdadero interés y con ganas de conocer la respuesta “¿cómo estás?”.
Se mueren. Los otros, nosotros no. De momento. Nos quedamos en el impacto de la noticia medio minuto pero lo mandamos al olvido pronto y nuestra vida sigue… lo mismo que la vida de los otros seguirá el día que seamos nosotros los fallecidos.
Somos millones pero nos relacionamos solamente con unos pocos. En nuestro círculo íntimo caben muy poquitos, casi ninguno; hay más conocidos a los que denominamos amigos pero realmente todos no lo son. El resto… como si fuesen otra especie que habla un idioma distinto y vive en otra dimensión.
Pero no es cierto… compartimos el mundo… somos lo mismo… estamos juntos y hemos coincidido en este mismo espacio de tiempo.
Los otros también tienen sus circunstancias, son de carne y huesos, lloran, abrazan a sus seres queridos, aman o no aman y son o no son amados, se asoman a la ventana y dejan que una lágrima recorra su mejilla, añoran, recurren a la nostalgia o a la fantasía para sobrevivir, cargan como pueden con sus traumas y sonríen cuando pueden. No siempre.
Se nos va la vida y tal vez no hemos afrontado este asunto como se merece. Tal vez actuamos como pasajeros de paso y no nos detenemos a prestarle atención. Tal vez no pensamos en esto –y en muchas otras cosas- y cuando nos demos cuenta ya será, lamentablemente, tarde.
Te invito a volver al principio, observar con otra atención, y comenzar de nuevo. Y me estoy refiriendo a esta lectura y a tu vida.

Te dejo con tus reflexiones…


Francisco de Sales.

Publicado por JEAC.




miércoles, 3 de julio de 2019

Fiesta de San Juan-Ritual Andino (Parte III-Final)


Otra actividad tradicional de San Juan -y que todavía permanece aunque es muy poco visible- era leer la suerte, que podría ser en pedazos de estaño derretidos en sartenes y luego colocados con un cucharón en otro recipiente metálico lleno de agua, el contacto de los dos líquidos provoca la formación de figuras variadas, algo así como las llallagua (illas) donde el yatiri comienza a describir tu futuro.
También se usa la clara de huevo en la cerveza: si la espuma desborda el vaso te irá bien; si no el año venidero será negativo.
Era común también utilizar pajaritos amaestrados que, después de escoger una hoja entre cientos de papelitos de un pequeño cajón ubicado por debajo de su jaula, entregaban la suerte escrita del feligrés a su amaestrador. Otra forma de leer la suerte tenía que ver con la papa, tres unidades eran colocadas en un recipiente, una pelada, otra a medio pelar y la tercera sin pelar, luego sin mirar el interesado debería sacar una sola; si sacaba la papa con cáscara el año sería propicio, siendo la otra totalmente pelada, negativa, también se usa para este menester el cigarro, el café con leche u otras para la lectura del futuro.
Se considera a esta fecha como el día más frío del año, aunque esta percepción está más relacionada con el 21 de Junio que es el momento en que el hemisferio sur se aleja más de la tierra, y por eso se celebraba el solsticio de invierno, denominado como el Inti Raymi, cuando los niños y los animales lloraban para evitar que el sol se aleje más y por esta razón se hacia una serie de rituales.
El proceso de conquista provocó la imposición hábilmente pensadas de fiestas católicas sobre las festividades andinas, tal el caso de San Juan (24 de Junio) sobre el solsticio de invierno (21 de Junio) o Navidad (25 de Diciembre) sobre el solsticio de primavera(21 de Diciembre), que recuerdan la lógica de estructuración de la cosmovisión y filosofía andina, pensar en dos mitades el año con sus festividades recurrentes.

Milton Eyzaguirre Morales – Magister en Antropología


Publicado por JEAC.

sábado, 29 de junio de 2019

Fiesta de San Juan-Ritual Andino (Parte II)


En otros lugares se suele colocar las fogatas en pequeñas construcciones improvisadas hechas de piedra, las cuales deben recibir la atención necesaria durante toda la noche y la madrugada, hasta la llegada del sol. En otros se suele quemar la paja en las faldas de los cerros y en los corrales "para abrigar a los animales".
Esta fecha también fue utilizada para quemar ropa vieja o muñecas hechas de este insumo para alejar la mala suerte. También era parte de la renovación, es decir cerrar un ciclo y comenzar otro, o esperar que en el futuro no te falte ropa, aspecto que fue reiterativo en las actividades de San Juan en los años pasados en los espacios urbanos.
Este ritual marcaba implícitamente un periodo de paso y renovación, este proceso culminaba con el uso de agua, el mismo día del Santo cuando se echaba agua en la nuca o empapaba a jóvenes y adultos, algo así como cumpliendo el atributo principal de San Juan Bautista; se decía que era como el Carnaval, era el paso del periodo seco (fuego) al periodo venidero de las lluvias (agua).
Hasta hace unos 30 años atrás, a partir de las 18:00 aproximadamente, las laderas con pajonales en torno a la ciudad de La Paz eran devoradas por el fuego, complementadas con la infinidad de puntos luminosos en los lugares habitados, fogatas en todas las direcciones que solían permanecer hasta la madrugada, calles de fuego donde los vecinos salían a socializar, calles de tierra o piedra. Las llamas eran atizadas con todo tipo de combustible, principalmente leños secos, pero el entusiasmo podía provocar que se añadan sillas, mesas, ropa vieja, libros y cuadernos (bajo la lógica de que esto te convertiría en más estudioso), actividad que se condenó cuando se comenzó a quemar llantas.
En algunos ámbitos además del uso de fuegos artificiales, era común el consumo del "té con të, bebida sencilla en base a agua, azúcar y té que se calentaba en calderas de metal, en la misma fogata y posteriormente se agregaba el singani. Este era un buen mecanismo de socialización entre los vecinos de una misma cuadra.
Cuando el fuego dejaba la leña en carbón incandescente era el momento propicio para colocar papa con cáscara, que en la madrugada se sacaba y consumía, y cuyo sabor era muy agradable y conocido como watia.
En algunas regiones se solía saltar en la fogata para ver si te iba a ir bien en el futuro. En los territorios del Oriente boliviano como San José, Santa Ana y San Rafael de Chiquitos, entre otros, se solía colocar el carbón al rojo vivo como una especie de alfombra y algunas personas que se animaban cruzaban de un lado a otro con los pies desnudos. Se decía que si pasabas por este lugar y no te salían ampollas, tu futuro iba a ser favorable. (Continuará)
 
Milton Eyzaguirre Morales (Magister en Antropología)


Publicado por JEAC.

miércoles, 26 de junio de 2019

Fiesta de San Juan-Ritual Andino (Parte I)


Para entender mejor lo que representa esta fiesta en el mundo andino y que con el pasar del tiempo los citadinos hemos ido deformando, transcribo a continuación un trabajo de Milton Eyzaguirre Morales (Magister en Antropología) y que fue publicado en la prensa. (La fiesta patronal de San Juan mecanismo de encubrimiento de la ritualidad andina).
Un excelente trabajo de investigación según mi humilde punto de vista y que merece ser leído en su integridad. Para comodidad en su lectura la
he dividido en tres partes.

Muchos recuerdos marcaron mi infancia con relación al tema de San Juan. El referente festivo - del mes de Junio y que no era feriado, aunque muchos lo anhelaban- constituía un momento de quiebre, la presencia del fuego era un articulador y marcador social bastante poderoso porque permitía la interrelación entre los vecinos, amigos e inclusive extraños, porque al amparo de las fogatas se solían organizar reuniones con música y bebida: y la fiesta familiar, que se organizaba con el fuego por delante de cada casa, como en las sayañas en el área rural, podría volverse en una celebración mayor. En ese tiempo la relación de encubrimiento de una fecha sobre otra ni siquiera era percibida.

La fiesta de San Juan se ubica en el periodo denominado juyphi pacha (tiempo de helada), cuyo inicio se marca por una festividad importante en la región andina que es la Fiesta de la Cruz, el 3 de Mayo, siendo visible la chakana (cruz andina) en el hemisferio sur, cuando en toda esta zona el polo sur se inclina y tiende a alejarse del sol, aspecto que señala el ingreso a este tiempo, cuando se dan las últimas cosechas, el campo tiende a cambiar del verdor al amarillo y comienza la tarea de deshidratar la papa para obtener el chuño y la tunta.
Este periodo permite realizar los trabajos de la trilla, para sacar la cáscara del trigo con caballos o inclusive con los niños. Es el tiempo para dedicarse a los animales, en especial a los rebaños. En varias regiones se realiza el colocado de las ch'ikulla o marca individual, se escogen a los animales que serán illas (amuletos) que multiplicarán el hato ganadero. Para esta ocasión se entierran los conopas, que son unos vasos challadores en forma de animal, en el centro del corral donde descansan para propiciar su reproducción,
En el pasado se solían realizar animales en miniatura con harina de quinua (kispiña) y se colocaban en pequeños platos como si fuera su corral, actividad que actualmente solo se realiza para el Día de Difuntos (Noviembre).

Pero que tiene que ver toda esta actividad con el uso del fuego, tan común en el pasado en las regiones urbanas y rurales para esta época?
En la víspera de San Juan se preparan en varias regiones cúmulos de paja (hichu) y restos secos de plantas cosechadas, cada montón para los vacunos, cerdos, ovejas, cuis y gallinas, los cuales se encienden y son challados con alcohol a modo de alimentar las illas de estos animales para que no les falte pasto.
Esto no queda simplemente en el espacio cercano de la casa, sino que también en los lugares de cultivo ya cosechados se enciende fuego bajo esta misma lógica: generar mejores pastos. Se da mayor atención a la hoguera de los vacunos por su relación cercana con el cultivo agrícola, que sirve para la siembra.

La connotación importante para el uso del fuego es que la tierra se encuentra fría; desnuda, ya que no tiene cultivos y está adormecida por la helada, razones suficientes para brindarle calor. Simbólicamente se le pretende devolver el ardor, ya que lo frío se asocia con la esterilidad y la Pachamama debe ser cálida y fértil.
Este concepto es recurrente en la vida social en el área rural, ya que cuando se atiende los partos debe ser en el lugar más caliente del hogar, la cocina, totalmente diferente a la percepción de la biomedicina, que condena en la actualidad a las parturientas a salas frías de hospital y clínicas.  (Continuará)


Publicado por JEAC.

lunes, 17 de junio de 2019

Mensaje de vida


La madre de mi amigo ha comido de manera saludable toda su vida. Nunca ha consumido alcohol o comida chatarra; hace ejercicio todos los días, era muy ágil, muy activa, llevó todos los suplementos sugeridos por su doctor, nunca salió al sol sin protector solar y cuando lo hizo fue por el período más breve posible; así que prácticamente protegió su salud a lo máximo. Ahora tiene 76 años y tiene cáncer de piel, cáncer de la médula ósea y osteoporosis extrema.
“El padre de mi amigo come tocino, mantequilla, grasa y nunca se ejercita; salía al sol y se quemaba todos los veranos (básicamente tomó el enfoque de vivir la vida a su máximo y no como otros sugieren). Él tiene 81 años y los médicos dicen que su salud es la de una persona joven.
“Las personas no pueden esconderse de su veneno, está por ahí y las encontrará. Las palabras de la madre de mi amigo fueron estas: ‘si yo hubiera sabido que mi vida iba a terminar de esta manera, hubiese vivido más y disfrutado todo plenamente’.
“Ninguno de nosotros saldrá de aquí con vida, así que por favor deja de tratarte mal hasta con los pensamientos. Come la comida deliciosa. Camina a la luz del sol. Salta al mar. Di la verdad que llevas en tu corazón como un tesoro escondido. Sé tonto. Sé amable. Sé raro. No hay tiempo para nada más”.

Keanu Reeves


Publicado por JEAC.

lunes, 10 de junio de 2019

Al despertar


Al despertar, bendice el día porque ya está lleno del bien invisible que atraerá tus bendiciones, porque bendecir es reconocer el bien ilimitado que es la esencia misma del Universo y espera a todos y a cada uno de nosotros.
Bendice a la gente que ves en la calle, en los lugares de trabajo y de juego. La paz de tu bendición los acompañará en su camino y el aura de su suave fragancia los iluminará.
Cuando hables con la gente, bendice su salud, su trabajo, su dicha, su relación con Dios y con los demás.
Bendícelos en su abundancia, en sus finanzas, bendícelos de todas las formas concebibles, porque tales bendiciones no solamente siembran semillas de sanación, sino que un día brotarán como flores de alegría en los espacios vacíos de tu propia vida.

Tomado de la web.


Publicado por JEAC,

sábado, 1 de junio de 2019

La piedra que hoy me lanzas...


La piedra que hoy me lanzas, puede ser la misma con la que tropieces mañana

El actuar sin medir las consecuencias es muestra de inmadurez y de ignorancia, cada cosa que hacemos, cada palabra que decimos, cada juicio que emitimos tendrá un efecto en nuestras vidas, ¿en qué momento? No podemos saberlo, lo que sí es seguro es que desde las que creemos insignificantes, hasta las de mayor envergadura tendrán una consecuencia en nuestras vidas.
Sabiendo esto, lo más inteligente es actuar siempre con consciencia y con justicia, no procurar acciones que por favorecernos a nosotros perjudiquen a otros, porque si bien es cierto que debemos ser garantes de nuestra felicidad, procurar para nosotros lo mejor, esto no puede representar el sacrificio de la felicidad de otro, porque la vida con sus variadas demostraciones se encargará de decirnos que lo que hicimos no estuvo bien, y realmente palparemos los efectos de nuestras acciones.
No se trata de un castigo, ni que nos sintamos amenazados, se trata de actuar de manera consciente, de manera noble, de no procurar para los demás lo que no nos gustaría que formara parte de nuestras vidas, no por miedo a lo que nos puede pasar, pero sí conscientes de que si no sembramos el bien, probablemente nuestra cosecha no sea de las mejores.
La vida es un eco, lo que damos a ella lo recibimos de vuelta, así que no juzguemos, porque hoy podemos atravesar una realidad, pero mañana, podemos estar del otro lado de la partida y darnos cuenta de lo nocivo de los juicios ajenos y entender a profundidad situaciones que muchas veces si no se viven, no somos capaces de comprender las maneras de reaccionar.
Seamos empáticos y solidarios, no juguemos a ser jueces y mucho menos nos creamos los dueños de la verdad, la verdad es muchas veces relativa, pero lo que sí no es relativo son las intenciones con las que se lleva a cabo una acción, inclusive cuando los resultados no coinciden con las intenciones. Si sé que perjudico con mis palabras, con mis acciones, con mis deseos inclusive, debo prontamente rectificar, porque lo que recibiré a futuro no será de provecho.

No seamos tan afilados con los demás, dejemos el egoísmo a un lado, para todos hay y en abundancia, de lo bueno y de lo malo, actuemos desde la bondad, no lancemos piedras a otros, con las cuales podamos tropezarnos mañana. Seamos ecuánimes, seamos lo más justos posibles y no le procuremos un daño a alguien por satisfacer nuestros caprichos, porque la vida es un bumerán y lo que lanzamos tarde o temprano llega a nosotros.

Tomado de la web.


Publicado por JEAC.

miércoles, 22 de mayo de 2019

Eres en ti

Eres en ti.
Vives en ti.
No sé si te has dado cuenta, pero las personas van, vienen, se pierden, se
ausentan, vuelven... pero hay alguien que siempre se queda contigo: tú.
Sí, esa persona que eres, que vive en ti, que, a veces, desconoces, o crees no
conocer lo suficiente. A veces te sorprende, porque es capaz de hacer algo
más grande de lo que nunca hubieras pensado, o incluso superar algo que
nunca hubieras imaginado.
Así de infinito es tu poder.
Así de infinito eres tú.


Laura Chica.(De su libro “365 citas contigo”)


Publicado por JEAC.

domingo, 12 de mayo de 2019

Ocho poderosas decisiones


Me refiero particularmente a lo que realmente determina cómo te sientes en este momento ante tus problemas y retos. Estoy hablando de tu actitud. Es decir, de cómo tú eliges responder ante las circunstancias y quién decides ser ante el cambio.
Es tu actitud la que puede aumentar o reducir tu estrés de manera profunda.
Si bien darse un masaje o hacer ejercicios —o incluso el amor— son excelentes antídotos contra el estrés, si no son acompañados por un cambio de actitud apenas llegan a tener un efecto temporal.
¿Cómo te adueñas de tu actitud? A continuación te ofrezco ocho simples pero poderosas decisiones para tomar control sobre tus respuestas ante lo que te sucede, reducir significativamente tu estrés y aumentar tu capacidad para manejar el cambio.


Primera decisión:
En vez de resistir… Yo Acepto
Acepta lo fáctico, lo que es un hecho. Hay circunstancias que, por más que te esfuerces, no puedes cambiar —al menos no tan rápido como te gustaría. En ocasiones el cambio, aunque no te guste, es un hecho.
Tu estrés aumenta cuando resistes lo que te sucede. Al resistir le das poder a aquello que estás resistiendo. Al aceptar y soltar tu resistencia recuperas tu poder y puedes sentirte mejor.
En este instante en tu vida, en tu trabajo ¿qué es importante aceptar? ¿Qué puedes dejar de resistir?
Que quede claro: no estoy sugiriendo que te resignes. Tú puedes aceptar las circunstancias actuales —simplemente por el hecho de que en este momento, son esas las circunstancias— y a la vez elegir cambiar lo que está en ti modificar.

Segunda decisión:
En vez de resignarme… Yo aprovecho
Así como es importante aceptar lo fáctico también es fundamental aceptar tus posibilidades de acción inmediata y transformación a futuro. Esto es lo que hace la diferencia entre la resignación y la ambición activa por una mejor situación.
Aprovecha lo que sí está en tus manos hacer, lo que tú sí puedes controlar, aquello en lo cuál sí tienes injerencia y te es posible llevar a cabo.
¿Qué oportunidades puedes aprovechar?
Cuando identificas tus oportunidades y actúas para aprovecharlas, te alejas de la ansiedad producida por la sensación de estar fuera de control. En vez de sentirte al efecto pasas a experimentarte como causa.
Así que ponte en movimiento y decide aprovechar lo que sí está en ti lograr.

Tercera decisión:
En vez de evadir… Yo Asumo
¿Qué de lo que te afecta tiene que ver contigo?
Cuando las cosas no son como las quisiéramos es muy fácil apuntar hacia afuera y buscar un culpable. El reto—y la esencia de la madurez—está en asumir lo que es tuyo: la forma en que tú has contribuido a lo que hoy sucede y la oportunidad que tienes para cambiar las cosas.
Si evades tu responsabilidad, niegas tu poder y tu capacidad para aprender. Cuando asumes lo que te corresponde te adueñas de tu poder al momento que tomas consciencia sobre lo que puedes aprender y mejorar.

Cuarta decisión:
En vez de sólo desear… Yo Me Comprometo
La única forma de obtener resultados diferentes es haciendo cosas distintas. Desear algo mejor es necesario, pero no es suficiente. El deseo debes acompañarlo con el compromiso de hacer lo que haga falta hacer para mejorar tus circunstancias.
¿Qué vas a cambiar para lograr sentirte mejor?
Tus hábitos cotidianos pueden reforzar tu energía y debilitar tu estrés. En este sentido, algunos cambios simples pueden hacer gran diferencia.
Por ejemplo, si eres de los que diariamente te sometes a una intensa dieta mediática, qué tal si eliges leer menos la prensa diaria y evitar el maratón de los noticieros nocturnos en televisión justo antes de acostarte. Te apuesto algo: el mundo no va a cambiar porque tú dejes de ver, escuchar y leer noticias; pero tú salud mental sí puede beneficiarse enormemente de una adecuada dieta mediática.
¿A qué simples cambios te comprometes para lograr lo que necesitas para sentirte mejor?
¿Qué hábitos constructivos y positivos puedes incorporar en tu vida?

Quinta decisión:
En vez de preocuparme… Yo Me Ocupo
El antídoto para tus preocupaciones: ocúpate; ponte en acción; muévete hacia lo que quieres y está en ti lograr.
Hay situaciones que definitivamente escapan de nuestro control. Hagamos lo que hagamos, ni siquiera podemos influir sobre ellas. Entonces, ¿qué caso tiene preocuparte por aquello que escapa de ti?
¿Algo te preocupa? ¿Está en ti hacer algo al respecto? Entonces ponte en acción; de lo contrario, acepta que eso escapa de tu esfera de influencia y decide soltarlo para hacerte cargo de las oportunidades que sí puedes aprovechar.
Quizá no puedas cambiar tus circunstancias en este momento. Pero sí puedes elegir una actitud que te permita aceptar lo que es, aprovechar lo que es posible, comprometerte a lograr lo que quieres y ponerte en acción.

Sexta decisión:
En vez de olvidarme de lo que tengo… Yo Agradezco
Cuando los niveles de estrés se incrementan y te encuentras rodeado de cambios y nuevos desafíos, es normal que pierdas perspectiva y te desconectes de lo que tienes. En medio del caos corres el peligro de dar por sentado y olvidarte de lo que realmente llena tu vida y constituye tus éxitos y fortalezas.
¿De cuántas cosas podrías estar agradecido en tu vida?
La gratitud es un excelente antídoto ante las sensaciones de desesperanza, ya que te permiten conectarte con la abundancia y magia de tu vida. El agradecer te permite enfocarte en lo que tienes —para continuar avanzando hacia tu éxito y plenitud— en vez de aquello que te hace falta.
En la gratitud los miedos se desvanecen ya que te das cuenta de que has recibido y tienes más de lo que creías. Conéctate con ella y no olvides los miles de regalos que has disfrutado en forma de experiencias, amistades, aprendizajes, momentos, oportunidades, amores. talentos, fortalezas, conocimientos.
¿Qué podrías agradecerle a la vida en este momento?

Séptima decisión:
En vez de desconfiar… Yo confío
¿Estás eligiendo creer que tus problemas son más grandes que tú o que tú eres más grande que ellos?
¿Crees que tus circunstancias negativas son permanentes o sabiamente eliges creer que todo se mueve en ciclos y que después del invierno viene la primavera?
¿Estás pensando que estás al efecto de las circunstancias o sabes que tú tienes el control para adueñarte de tu capacidad para salir adelante?
¿No te sientes seguro de quienes te acompañan o decides confiar en el carácter y la capacidad del otro?
Confiar o no confiar. La decisión es tuya.

Octava decisión:
En vez de visualizar en negativo… Yo Apuesto a Ganar
Como decía Henry Ford, “si crees que puedes o crees que no puedes, estás en lo cierto”. En ti está elegir conscientemente apostarle a tu éxito y tener fe en que todo lo que sucede es lo mejor.
El miedo se alimenta de una proyección mental catastrófica de lo que puede sucede. Esa misma energía y talento para visualizar en negativo puedes enfocar en lo que realmente deseas: el éxito.
No es simple pensamiento positivo. No es pretender ingenuamente que todo va a salir bien por el simple hecho de pensar que así va a ser. Hasta es la octava decisión. Ya aceptaste la realidad. También identificaste lo que puedes aprovechar de las circunstancias. Además has asumido tu responsabilidad en el proceso. Estás comprometido a la acción y estás ocupándote de lo que es posible. Conectado con la gratitud por lo que ya tienes, decides confiar en ti, en el otro y en el proceso.
Ya lo que queda es apostar a ganar… y llevar tus decisiones a la acción.

Tomado de la web.


Publicado por JEAC.

jueves, 2 de mayo de 2019

Alberto Cortez-Parábola de uno mismo


Una hermosa canción de Alberto Cortez que nos describe nuestro recorrido por la vida. Confieso que no la conocía y que la escuché de casualidad hace algunos días. Me sacudió tan profundo que decidí compartirla. Es la historia de todos y cada uno de nosotros en el transcurrir de nuestros días. Escúchenla y léanla y se sentirán identificados con la letra…
  
Parábola de uno Mismo

"Uno va subiendo la vida
de a cuatro los primeros escalones,
tiene todas las luces encendidas
y el corazón repleto de ilusiones.

Uno va quemando energías,
es joven, tiene fe y está seguro.
Soltándole la rienda a su osadía,
llegará sin retrasos el futuro.

Y uno sube, sube, sube,
flotando como un globo en el espacio,
los humos los confunde con las nubes,
subestimando a todos los de abajo.

Y uno sigue, sigue, sigue
sumando vanaglorias y ambiciones;
no sabe en realidad lo que persigue
y va de distorsión en distorsiones.

Uno es un montón de etiquetas,
es un escaparate, un decorado,
un simple personaje de opereta,
un fruto de consumo consumado.

Uno es una simple herramienta
que tiran cuando ya caen en desuso;
uno lo sabe pero no escarmienta,
sigue aferrado a la ilusión que puso.

Y uno piensa, piensa, piensa
que siempre seguirá en el candelero,
que nunca ha de vaciarse su despensa,
que queda mucha tinta en el tintero.

Y uno sigue, sigue, sigue
cautivo de su imagen, caminando.
El ego desbordado no concibe
que muchos otros vengan empujando.

Y uno va teniendo evidencias,
ya no recibe flores ni palmadas:
rechaza que empezó su decadencia,
que va por la escalera de bajada.

Uno alza su voz de protesta,
suplica por seguir estando a bordo
y duda, cuando nadie le contesta
si ha quedado mudo o si son sordos.

Y uno baja, baja, baja,
no quiere, por orgullo, lamentarse
que ya no es quien baraja la baraja
ni se ha guardado un as para jugarse.

Y uno baja, baja, baja,
desciende lentamente hacia el olvido;
hay algo en su balance que no encaja,
lo que ha querido ser y que no ha sido.

Uno queda solo en la mesa
migando su pasado amargamente,
le cuesta confesar que ha sido presa
de un canto de sirenas permanente.

Y uno es una isla desierta,
un médano en el mar, un espejismo
empieza por abrir todas las puertas
y termina a solas con sí mismo."

Letra: Alberto Cortez
Música: Alberto Cortez


Publicado por JEAC.